lunes, 11 de marzo de 2013

POSITIVO 2.30 - ME REIRÉ DEL MUNDO

Si visitas este blog por primera vez, te doy la bienvenida, recomendándote que leas en primer lugar el post: POSITIVO 2.30 - INTRODUCCIÓN, verás qué sencillo es formar parte de este PROYECTO POSITIVO.

El ser humano es la única criatura capaz de reír; aprovecharé ese don cuanto pueda. Cultivaré el hábito de reír, sonreiré y mejorará mi digestión, reiré calladamente y mis tensiones se aliviarán, reiré y mi vida se prolongará, pues la risa es el secreto de la longevidad.

Me reiré del mundo, sí, y sobre todo me reiré de mi mismo, pues los humanos damos risa cuando nos tomamos demasiado en serio. ¿Qué puede ocurrir antes de ponerse el sol que no resulte insignificante en la corriente de los siglos?

Me reiré del mundo, pero, ¿cómo podré reír cuando esté delante de una persona o un hecho que me hiera tanto que me haga llorar o maldecir?
He recibido tres palabras de los antiguos que me ayudan a seguir avanzando, esas tres palabras son: también esto pasará.
Sí, podemos tener la seguridad que todas las cosas terminan por pasar, y entonces, si todo terminará pasando ¿por qué preocuparme tanto?

Me reiré del mundo, colorearé ese día con mi risa, me alegraré esta noche con una canción. Nunca trabajaré para ser feliz, más bien me mantendré tan ocupado, que  no encontraré tiempo para estar triste.
Me reiré del mundo y con mi risa todas las cosas quedarán reducidas a su verdadera proporción.

Me reiré de mis fracasos y se desvanecerán como tantos otros sueños. Me reiré de mis éxitos y quedarán limitados a su justo valor.

Mientras sea capaz de reír nunca seré pobre. Sólo con la risa y la felicidad puedo ser un auténtico triunfador, sólo con la risa y la felicidad puedo disfrutar del producto de mi esfuerzo, de no ser así mejor sería que fracasara, pues la felicidad es el vino que da sabor a los alimentos.

Para disfrutar el éxito debo tener felicidad y la risa me ayudará a obtenerla. ¡Seré feliz, tendré éxito, seré la persona que quiero llegar a ser!

Og Mandino nos ofrece en este escrito una de las mayores lecciones positivas sobre la vida que podamos oír jamás.

Y ahora, si tienes oportunidad, cierra los ojos unos treinta segundos y reflexiona: ¿Acostumbras a reír? ¿Cuánto has reído hoy?
Si creías que no tenías motivos para hacerlo espero, que después de esta lectura, esboces al menos una sonrisa: hazlo, pruébalo y observa cómo te sientes…

Gracias. Salud y Paz


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